domingo, 31 de marzo de 2013

To the limit {22}

-Emma.
-¿Sí, Justin?
-¿Quieres ser mi novia?.-Abre los ojos como platos.-En serio, que yo tampoco sé como pasó pero pasó, es que... también te quiero, te jur...
-Justin.-Me calla poniéndome su dedo indice en mis labios, que quita en tres segundos.-¿Estás seguro? ¿Vas a renunciar a todas las siliconas, y aferrarte a mí?
-Estoy seguro, y no hay otra cosa que más quiera que aferrarme a ti.
-Sí.-Dice sonriendo.
-¿Sí?
-Que sí, que quiero ser tu novia.-¡BUM! adiós corazón.


                                     NARRA EMMA

Mis pies empiezan a elevarse del suelo, me levanta y vuelve a besarme, está vez más intenso. Otro beso, y otro, y otro, y otro más.  Me baja dejando que mi pies vuelvan a tocar la realidad.

-Te quiero.-Me susurra.
-Te quiero.-Le susurro.

Emma... ¿Tú no saliste de tu casa con la intención de caminar sola, y coger aire? Y has acabado con novio. ¿Cómo has tenido el puto valor de decirle "Te quiero"? te mereces un aplauso. Me repetía mi subconsciente.

                                           NARRADOR

Después de todo, es imposible desafiar al corazón. Ella está como una niña pequeña que por fin, a conseguido lo que llevaba esperando toda su vida y Justin... bueno, Justin está experimentando cosas que nunca había sentido, de las cuales se asusta, pero le gusta. No se separan, tampoco hablan, se roban besos y alguna que otra sonrisa.

Y en ese momento, te das cuenta de que tienes una segunda oportunidad, una segunda oportunidad que no se puede desaprovechar.

Sus ojos tienen un brillo diferente, es increíble, ¿no? a partir de este momento, eran novios. Ellos son la prueba de que del odio al amor, hay sólo un paso.

                                                        NARRA EMMA

-Entonces, ¿oficialmente eres mi chica?
-Tuya, ¿y tú sólo mío?
-Sólo tuyo.

Y volvemos a besarnos, un beso que crea magia. Sus labios se mueven como plumas sobre lo míos, sin lenguas, solo nuestros labios. No se necesita un beso apasionado para sentir esas cosquillas en el estómago.

Volvemos a acabar tumbados en el césped, yo me tumbo boca arriba y Justin boca abajo, teniendo su torso encima de mi pecho y las piernas en la hierva. Agarra mi mejilla izquierda con una de sus manos, me da un ligero beso mordiendo mi labio inferior para luego dejarlo caer.

-Justin, no sé nada de ti.
-¿Qué quieres saber?.-Me elevé de hombros.
-Todo.
-Bueno, soy de aquí, vivo con mi madre y mi padre tiene una empresa, así que tiene que viajar mucho. Tengo dos hermanos pequeños.-Sonrío a esto.-No tuve una infancia lo que se dice "fácil" Y como te dije, no sé mucho de estás cosas, entré al instituto y mi vida se volvió un completo caos. Chicas, alcohol, velocidad... Nada bueno. Hasta que vino una chica, la primera que me retó y no me tonteó. Y desde ahí, supe que era diferente, aun que no me lo puso nada fácil.-Vuelvo a sonreír.-Te toca.
-Vivo con mis padres que llevan una buena relación, son un gran apoyo. De pequeña no se puede decir que tuviera "Muchos amigos", siempre estaba con Brit, ella siempre estuvo en los buenos y malos momentos, cuando me sentía sola ella siempre estaba. Fui creciendo y conocí a Jack con el que eché a perder un gran y valioso tiempo.-Hice una pausa.-Parecía que íbamos a llegar lejos, pero no fue así y ahora, lo prefiero. Él... trafica, lo peor fue que no me contó nada. Una de las veces hasta me amenazo.
-El muy cabrón.
-Ese mismo día, pensé en lo peor, en acabar con todo, pensé en que no podía confiar en nadie, pero...
-Sácate toda esa mierda de la cabeza.
-Pero por suerte, acabe siendo vecina del chico más odioso, mujeriego, egocéntrico, caprichoso...-Frunció el ceño.-Del mundo. Que actualmente es mi novio. 

Volvió a besarme, mi novio, lo he llamado mi novio, suena raro, pero bonito.

-Me encanta la forma de como me odias.
-Y a mí. Vamonos anda, antes de que sea más tarde.

Se levanta y me extiende sus manos, doy un pequeño salto y me pongo en pie. Vamos hacía su coche, me abre la puerta como las veces anteriores y me coloco en el asiento del copiloto, abrocho mi cinturón y mientras tanto Justin se sienta en el asiento del piloto. Abrocha su cinturón. Nos miramos. Sonreímos. Y arranca.

Miro por la ventana y vuelvo a mirar a Justin, este ya esta concentrado mirando a la carretera. Giro mi mirada y los ojos empiezan a pesarme, estoy muy cansada, los cierro pero sólo duran así un minuto.

-Nena, ya hemos llegado.

Me incorporo al asiento, desabrocho mi cinturón y salgo, cierro la puerta de un pequeño portazo. Nos acercamos a mi puerta, Justin me agarra un poco más abajo de la cintura, roza su nariz con la mía,  pongo mis manos en sus hombros y la que se vuelve a lanzar soy yo. Mi lengua entra en su boca revisando cada rincón, pero una voz nos distrae.

-Tortolitos.-Me separo rápidamente.

Es Ryan acompañado de su grupito y de, ¿Las chicas?

-¿Habéis quedado sin nosotros?.-Dice Justin.
-Oh vamos, ustedes estabais más ocupados.-Elevo mis cejas.
-Estoy cansada, ya hablamos.-Me vuelve a dar otro corto beso.

Abro la puerta de mi casa y entro a empujones de Aly.

-¡Cuéntanos todo ya!




To the limit {21}

-Ya hemos llegado.

Se acerca para abrirme la puerta, pero yo soy más rápida y salgo antes. La cierro y cuando me voy a dar cuenta está frente a mi, cara a cara, empiezan los nervios y él se percata, se acerca acorralándome contra el coche y sosteniendo mi cintura. Le ayudo a acortar la distancia y posa sus labios encima de los míos, fundiendonos en un cálido beso que no le niego, pongo mi mano en su nuca y acaricio parte de su cabello. Se separa un poco pero lo suficiente para poder notar su aliento agitado en mi cara.

-No me aguantabas las ganas.-Me susurra.
-Vamos a entrar anda, tengo hambre.

Nos separamos por completo y me abre la puerta para entrar al establecimiento.

-¿Qué quieres?
-Un Big-Mac y un refresco.
-Dos iguales.
-Yo pag...-No me deja acabar.
-Tome.-Dice dándole el dinero a la cajera.
-¡Pero iba a pagar yo!.-Le digo haciendo pucheros.
-Yo te traigo, yo te invito. Coje una mesa.

Miro y me acerco a una del fondo, justo alado de la ventana. Me sigue Justin con dos bandejas. Me alcanza la mía y yo la giro, abro la pequeña cajita, mojo mis labios y me llevo una patata de la pequeña bolsita a la boca.

Observo a Justin que muerde su hamburguesa, me mira y curva sus labios para formular una sonrisa casi inexsistente. Bebo un sorbo de mi refresco y empiezo con mi hamburguesa, la degusto, está riquísima. Justin me mira intentado contener la risa.

-¿Qué pasa?.-Digo riéndome yo también.
-Nada.

Acabamos la comida entre risas, bromas y cosas por estilo. Salimos a la calle, aire libre.

-Estoy llena.-Me llevo las manos a la barriga.
-Normal, te me has robado casi todas las patatas.
-¡Y tú las mías!

Da unos pasos delante de mi, aprovecho y salto a su espalda. Justin me sujeta, da una vuelta sobre sí mismo y emprende camino.

-¿A dónde vamos ahora?
-¿Dónde quieres ir?
-Se me antoja un helado.

Mira de un lado a otro y localiza un pequeño puesto de halados. Nos acercamos y me suelta, bajo con cuidado de su espalda y el hombre del carrito nos sonríe.

-¿De que lo quieres?
-Chocolate.
-Dos de chocolates por favor.

El hombre les entrega los dos a Justin y este me da uno a mi. Me adelanto y le doy el dinero.

-¡Oye! no deberías haber echo eso.
-No voy a dejar que lo pagues tu todo.
-Claro que sí.
-No te quejes y cómete tu helado, que se te derrite.

Me hizo caso y pasó su lengua por este. Me desprevení y tuvo la oportunidad de mancharme parte de mis labios y las comisuras.

-¡Bieber!.-Dije relamiendo por donde estaba manchada.
-¡No fui yo! ¡Fue el helado!
-Ya, claro.-Dije irónica.
-Sigues manchada.-Vuelvo a pasar mi lengua.
-¿Ya?
-No, sigues manchada.
-¿Por donde?

Se acercó a mi, sabía sus intenciones y joder, yo también quería, ¿para qué lo iba a negar? Cuando me fui a dar cuenta mi pies empezaban a pisar hierva. Choqué con un árbol y Justin me acorraló en este.

-Por aquí.-Me susurro.

Sus labios se posaron de nuevo contra los míos, suspire profundo. Pasó su lengua por las comisuras para luego introducirla en mi boca, inspeccionando cada rincón de esta. La velocidad aumentaba. Otro suspiro ahogado. Duramos así minutos, necesitaba aire, los dos. Pero también necesitaba no separarme. Me decidí por mi y me separé yo.

-No estaba manchada, ¿verdad?
-No.

                                        NARRA JUSTIN

Soltó una carcajada y yo reí con ella, se quedó unos segundos mirándome a los ojos, sin borrar la sonrisa de su rostro. Vuelve a soltar una pequeña risa que desparece al instante.

-Emma...
-Ajam.
-¿Sigues enamorada de Jack?

Ella baja la mirada y empieza a caminar dándome la espalda. Ya la has cagado Drew, ¿para qué se lo preguntas?

-Cuando lo veo, siento... ¿Asco?
-No me extraña.-Vuelve a reír.
-No quiero hablar de este tema, me pongo de mal humor.
-Te entiendo.
-No te pongas tan serio.-Me dice intentando forzar una sonrisa.

Suelto una carcajada, abro los brazos y Emma se lanza a estos. Me da un suave beso en los labios, eso hace que sienta, ¿magia? por llamarlo de alguna forma. Increíble Bieber, tú diciendo que sientes magia. Ya te vale tío.

-Te odio.
-Si lo haces, ¿Porqué me besas?
-Porque sí.
-Esa no es una buena explicación.
-Pues es la única que vas a escuchar.
-¿Seguro?.-Asiente y me quedo unos segundos pensativo.-¿Tienes cosquillas?
-¿Qué?.-Se aparta de mi bruscamente.
-Lo tomare como un sí.
-¡No espera! ¡Cosquillas no!

No le doy tregua y la tumbo en el césped, empiezo por la barriga y subo hacía su cuello, su risa es contagiosa y hace que yo también ría. Tienes cosquillas por todos lados.

-Quiero mi explicación.
-¡No! ¡Para!

Sigo y ella se agarra la barriga.

-¡Vale vale! ¡Pero para por favor!.-A parto mis manos poco a poco.
-¿Y bien?.-Ella aun ríe.
-Por qué te quiero Justin, no me preguntes ni porque, ni cuando, ni como porque no lo sé.

Un silencio, un fuego artificial sale de mis adentros, uno, dos, tres, una lluvia de colores. No, espera, ¿ha dicho que me quiere? ¿no es una broma de mal gusto?

-Me acabas de decir que me odias.-Digo divertido, intentado contener los nervios.
-También.
-Emma, ¿yo te gusto?

Se sienta y abraza sus rodillas, se queda unos segundos en silencio mirando a estas y luego vuelve a dirigir la mirada hacía a mi. Cruza sus manos en mi cuello y apoya su frente contra la mía.

-¿Yo te gusto a ti?
-Tú me encantas.

Vuelve a romper la pequeña capa de aire que nos separaba. Esto de que me regale besos es demasiado tentador. "Tú me encantas." te encanta Justin, te encanta.

La agarro de la caderas pegándola más a mi, suelta un gemido, eso puede traer consecuencias. Me tumbo en la hierva quedando ella arriba mía, vuelvo a decir que esto puede traer consecuencias.

-Está no es buena posición.

Digo aun sin separarme de sus labios, pero ella lo hace por mi al no poder contener la risa. Se pone de pie y yo hago lo mismo. Vuelve a enredar sus manos en mi cuello y yo vuelvo a agarrar su cintura.

-Emma.
-¿Sí, Justin?
-¿Quieres ser mi novia?



To the limit {20}

                                  AL DÍA SIGUIENTE

                                      NARRA EMMA

El resto del día de ayer transcurrió lento y aburrido, fue un día de... ¿reflexión? por lo que me dijo mi padre. Después de unos minutos despierta, pero acostada, me doy una ducha de una media hora, dejando que esas pequeñas gotitas artificiales despejen mi mente. Salgo y me visto con la ropa que puse en el lavamanos, dejo que el aire seque mi pelo, que ahora tiene ondulaciones, lo peino un poco y listo.

Acabo de atar mis Vans y bajo, mi padre está leyendo el periódico como suele hacer todas las mañanas.

-¿Y mamá?
-Oh, a ido a comprar, ¿pasa algo?.-Dice mi padre, con tono de preocupación.
-No, tranquilo.

Le abrazo por la espalda y deposito un beso en su mejilla derecha, él me responde con una amplia sonrisa.

                                    NARRA JUSTIN

Logan y Christian están viendo fotos con el móvil, mientras que Ryan y Chaz se dan leves golpes, es increíble que se hayan presentado todos en mi casa, a esta hora, para nada. Yo simplemente miro a el blanco techo.

-Bro, tu princesa sale de la casa.-Miro a Chaz incrédulo, ¿Mi princesa?

Me asomo a la ventana y veo a Emma cerrar la puerta, oh Dios, hoy está increíblemente preciosa, su pelo castaño está más claro gracias a la luz del Sol, lo lleva con ondulaciones. Sus ojos verdosos también están brillantes, lleva unos jeans cortos que deja lucir sus hermosas piernas y una camiseta de tirantes anchas, azul oscuro casi negro, al igual que sus Vans, lleva muy poco maquillaj... ¡Justin, reacciona! ¡Otra vez no tío!

-Se le cae la baba.-Le susurra Christian a Chaz.
-Te he oído.
-Man, tápate, que es capaz de venir tu madre y se te nota demasiado.-Me dice Ryan dándome unas palmaditas en la espalda.

Frunzo el ceño y bajo la mirada a mi entrepierna, mierda. Le doy un leve puñetazo en el hombro y este ríe. Vuelvo a mirar por la ventana, se está alejando con un gracioso contoneo de caderas, no puedo evitar morder mi labio inferior, no, no puedo evitarlo.

Ryan silva y se esconde rápidamente, eso hace que Emma se gire y quedo yo como el culpable, con mis habilidades consigo darle una patada disimuladamente, mientras esbozo una sonrisa y creo que no ha sido en un buen sitio.

-¿Espiándome Bieber?.-Me dice en un tono lo suficientemente alto para que yo me entere.
-No me des ideas. ¿Dónde ibas?
-Que te importa cotilla.-Me dice pícara.
-Bueno, voy contigo.
-¡No! que...

No le dejo acabar, busco a los chicos con la mirada pero no hay rastro de ellos, ¿dónde se han metido estos capullos ahora? vuelvo a mirar a la calle, ella me eleva una ceja y yo suelto una risa casi nula.

-Si tardas mucho, me voy.-Dice con sus brazos en jarras.
-Sube.
-¿Qué dices? ni loca.
-Sube, que no te voy a violar aun que quieras.
-Te odio.-Dice por fin, acercándose a la casa.

Llamo a Ryan al móvil, una llamada... dos... tres...

-¿Sí?
-¿Dónde os habéis metido gilipollas?
-Teníamos prisa y tú estabas ocupado.
-Pero avisadme.
-Venga bro, después hablamos.-Y cuelga.
-Cabrones.-Digo por lo bajo.

La puerta de mi habitación se abre y aparece Emma, no puedo evitar bajar la mirada hacía sus piernas, luego hacía sus caderas, sus labios, y por último a los ojos, me eleva una ceja divertida y doy una pequeña carcajada.

-No tardo en arreglarme.
-Eso espero.

Me quito la camiseta y a ella se le suben los colores, se gira rápidamente y carcajeo de nuevo. Me pongo una simple negra remangada por los codos de pico, unos jeans caídos del mismo color y mis Supras rojas.

-Ya.-Ella se gira y me revisa de pies a cabeza.

                                      NARRA EMMA

Lo reviso de pies a cabeza, esta increíblemente bueno, ¡Para Emma! ¡Qué se te va a notar! se peina y agarra las llaves, retrocede y se guarda el móvil en el bolsillo delantero. Me abre la puerta de la habitación y me cede el paso.

-Antes me abrió tu madre.
-No me digas.-Le doy con el codo en el costado.

Bajamos las escaleras, yo aun delante de él, su madre nos mira y sonríe, se le ve una mujer muy simpática.

-Mamá, vamos a salir.-Justin se acerca a ella y la besa en la mejilla.
-Tener cuidado.-Me despido con la mano y una amplia sonrisa.

Vamos hacía su coche, me abre la puerta y entro en este, abrocho mi cinturón, Justin se sienta en el asiento del piloto, estamos en silencio, esto se tensa. Me acomodo y miro por la ventana apoyando mi barbilla en los nudillos de mi mano derecha.

-¿A dónde vamos?
-No sé, tú me vas a llevar.
-¿Pero a donde te dirigías?
-No sé, iba a tomar aire.
-¿Y que hacemos en el coche?
-Tú sabrás, yo te he seguido.
-Bueno, ¿Qué te parece si vamos a comer y luego damos una vuelta?.-Asiento.
-¿Dónde quieres ir?
-¿Un McDonal's?.-Me mira extrañado pero reacciona rápidamente.
-Perfecto.

Arranca y nos ponemos en marcha. Lo miro. Me mira. Giro rápidamente la vista y él ríe. Invade el silencio, que no tarda en romperse.

-No estés tan tensa.
-No estoy tensa.
-Si lo estás.
-Que no lo estoy.


Sonríe y yo hago lo mismo, pero sin que él lo note. Después de 10 minutos ya estamos.

-Ya hemos llegado.

martes, 26 de marzo de 2013

To the limit {19}

-¿Estás solo?
-Sí.

¿Qué hago Emma? ¿voy o no voy? me hablaba mi subconsciente, pero mi madre siempre me dice que le haga caso a mis adentros, y mis adentros me están gritando que vaya. Es increíble, tendría que estar aborreciéndolo y no con ganas de ir a su casa y matarlo a besos, pero al fin y al cabo. ¿Quién lo podía odiar?

Me resigno con un hondo y profundo suspiro. Bajo las escaleras y procuro que mi madre no me vea, no sé me da bien mentir y como se ponga a interrogarme, lo va a averiguar. Por suerte no hay nadie en la cocina, ay Emma Emma, ¿quién te diría a ti que estarías en está situación? Consigo salir de mi casa sin problemas. Cruzo lo poco de calle y llegó a la de Justin, suspiro. Llamo al timbre y él no tarda en abrirme.

-¡Qué agradable sorpresa!.-Dice con una sonrisa pícara.
-Entra, no quiero que me vean.

Y seguido entra, le sigo y nos paramos en medio de su salón.

-Ni siquiera sé porque vengo, tendría que estar odiándote como hace... ¿unos días?
-Pero no puedes.-Se acerca y me agarra de la cintura.
-No te creas, que no me lo pones muy difícil.
-Cállate y dame el beso boba.-Dijo acercándose un poco más.

Entreabrió los labios e hizo el amago, pero giré la cara haciendo que me diera un beso en la mejilla. Ese escalofríos otra vez. Vuelvo a mirarlo a los ojos, me derrito con ese color miel tan perfecto que tiene. Frunce el ceño y me mira confuso. Sonrío y él intenta no hacerlo, ¿porque lo intenta?


-¿Qué pasa ahora?
-Tengo un serio problema contigo.

Junta su frente con la mía y ya no existe distancia entre nosotros, sus labios se juntan con los míos, pero este no es un beso como los anteriores, este  es suave, profundo, sin prisas pero sin pausas. Sus labios se mueven al compás de los míos como plumas. Esto es más que un simple calentón, que un simple capricho. Se separa lentamente y yo le vuelvo a dar un pequeño pico sonoro. Pero igual de suave que el beso anterior.

Sus labios están mojados a causa del beso, los tiene más rosados que nunca y sus ojos son como un caramelo recién echo.

               
                                     NARRA JUSTIN

Sus ojos verdosos brillan más que nunca, sus pupilas se mueven de un lado a otro observando con detalles los míos, suelto una pequeña risa y ella baja la mirada, sonríe y su sonrisa es tan... tan... ¡Justin! te estas volviendo loco.

                                        NARRADOR

Ella le vuelve loco, Justin no entiende a eso que le llaman corazón y mucho menos, la palabra amor. Emma lo ha vivido, pero no lo ha vivido como lo está viviendo ahora. Lo vuelve a mirar, se pone nerviosa y Justin lo nota, ella gira su cabeza hacía la izquierda y él le deposita un beso en su mejilla derecha. Ella ríe. Él ríe. Los dos están felices. ¿Qué más necesitan?

                                       NARRA EMMA

-No me mires así.-Digo con una sonrisa que cubre mi rostro.
-No puedo evitarlo.
-Ya tienes tu beso, ahora, ¿me sueltas?
-¿Y si no quiero?
-Venga, mi madre no sabe que he venido.
-¿Te has escapado?
-Sí.
-Chica mala.-Me suelto de su agarre con la ayuda de mis manos.

Le doy el último beso sobre la comisura de sus labios, un beso fugaz, pero de esos que te entran un cosquilleo extraño en el estómago. Salgo de la casa pero Justin me vuelve a agarrar de la cintura.

-Justin, sueltame.
-No quiero que te vayas. ¿Cuándo volverás a hacerme una visita?
-Vine para que no me restregaras que me cubriste ante mi madre y yo te debo algo.

Consigo volver a escaparme, me giro y Justin está apoyado en el marco de la puerta, le sonrío y vuelvo la mirada al frente, pero puedo notar como sus ojos están clavados en mi, y eso hace que me ponga más nerviosa de lo que estoy.

Por fin en la puerta de mi casa, abro con cuidado y entro a mi casa, por suerte sigue sin haber nadie.

-Ay Justin.-Digo en voz alta y seguido una corta carcajada.

Voy al salón y me siento en el sofá, noto una figura alta bajar las escaleras y me sobresalto.

-Papá, me has asustado.-Se sienta a mi lado.
-¿En qué pensabas?
-En nada.-Suspiro.
-Ese suspiro no dice lo mismo. ¿De dónde vienes?
-De dar una vuelta.
-Te trae loca el vecino.
-¡Papá! ¿te vas a poner igual que mamá?
-Perdón perdón.
-Después de Jack, no quiero a nadie más en mi vida.
-Cariño, si lo de Jack no salio bien, es porque no era tu destino estar con él. No por eso tienes que rechazar a todos los chicos.
-Me engañó, y no quiero que se repita lo mismo.
-No se tiene porque repetir, dale otra oportunidad a ese corazón que todavía le queda mucho por vivir.

Seguido me da un beso en la frente y se va, mi padre siempre a sido un gran sabio. Una brisa de nostalgia recorre mi cuerpo, es raro hablar estás conversaciones con mis padres, pero después me siento bien, muy bien.


                                      NARRA JUSTIN

Pasan las horas y llaman a la puerta y es Ryan, nos saludamos con un abrazo y unas palmaditas en la espalda. Subimos a mi habitación y me dejo a caer en la cama.

-Hoy estás muy feliz man.-Me dice algo sorprendido.
-Lo sé.
-Emma te tiene loco.
-¿Y tú que sabes?
-A mi no me lo puedes negar, a mi también me tendría, pero no soy de ese tipo de chicos.
-Tú tampoco te quedas atrás, las miraditas que le echas a Brit son algo descaradas.
-Es muy guapa, próxima conquista.-Suelto una carcajada y niego con la cabeza.

lunes, 25 de marzo de 2013

To the limit {18}

                                     NARRA JUSTIN

Los recuerdos vienen a mi cabeza.

FLASHBACK

-¿Nunca has sentido nada especial por alguien?
-Tú lo has estado, dime que se siente.
-Lo sabes, porque necesitas a esa persona más que a tu vida.

FIN DEL FLASHBACK

"Porque necesitas a esa persona más que a tu vida." Porque la necesitas... ¿Y si la necesito? No, lo que necesito es volver a ser el Justin Bieber de antes. Mi móvil suena, lo agarro y tengo un mensaje, ¿Lotte? esta chica no para:

Ven a la puerta de mi casa, por favor, tenemos que hablar urgentemente.

Me asusta la palabra "urgente", así que lo mejor es que vaya. Salgo de la casa y me subo a mi coche, arranco y tomo camino hacía donde ella me ha indicado y en menos de 10 minutos estoy allí. Lotte esta en la puerta y suelta una sonrisa pícara al verme. ¿Estaba esperándome? ¿Estaba segura de que vendría? bajo del coche y me acerco a donde está.

-Justin...-Dice tirándose para abrazarme.-Te he echado de menos.
-¿Qué pasa?
-Pasa a dentro.

Entro y me hace seña para que me siente en el sofá, me siento y no duda en saltar encima mía haciendo que me tumbe. Me da un suave beso en la comisura de los labios.

-Lotte, ¿Cuál es tu problema?
-Tu Justin, tú que pasas de mi.
-¿Y para esto me llamas?.-Digo molesto mientras la intento apartar, pero ella se apresura y mete sus manos bajo mi camiseta.
-No me niegues que no quieres volver a revivir esos momentos, Justin...-Si quisiera, mi colega respondería por mi.

Justin, inténtalo, alomejor un poco de movida es lo que te hace falta. Agarro sus muslos pegándola un poco más a mi. Pero no puedo joder, mi miembro no da señales de vida. No lo intentes Justin, no puedes. La aparto con un poco de brusquedad, pero por fin lo consigo.

-No... no puedo mierda, no puedo.

Desaparezco por la puerta en un abrir y cerrar de ojos, vuelvo corriendo al coche y suelto un profundo suspiro. Ni puedo, ni quiero. ¿Para que has venido Drew? cómo si no conocieras a Lotte. Pongo el coche en marcha antes de que salga a detenerme.

                                        NARRA EMMA

Me acuesto y espero que mañana sea otro día y no tan confuso.

                                     AL DÍA SIGUIENTE

Saco las tostadas y les junto un poco de Nutella, me siento en la mesa con mi madre, que esta toma un sorbo de su café.

-Que sonriente estas hoy.-Me dice divertida.

Le sonrío y le doy un mordisco al pan, cierro los ojos y degusto el chocolate. Limpio un mi boca que de seguro está y seguido, otro bocado.

-¿Vas a salir hoy?.-Me pregunta colocando su taza en el fregadero.
-No sé todavía, acaba de empezar el día.
-¿Vas a salir con Justin?.-Se me va el pan por otro lado, ¿a que viene eso?.-Tranquila, no digo a salir como pareja, si no a echar otro partido de baloncesto o en grupo.
-No.-Acabo la tostada.-Creo.

Le doy un beso en la mejilla a mi madre, cojo el móvil y subo a mi habitación. Lo enciendo y tengo un WhatsApp, me dejo caer en la cama de espaldas. Es de Justin y sonrío estúpidamente.

                                    VIA WHATSAPP

-Hola fea.
-Hola estúpido.
-¿Sospechó tu madre?
-No, eres un gran actor.
-Lo sé.
-Eres un creído.
-Hablando de creer, ¿crees que se me ha olvidado que me debes un beso?
-¿Estás solo?
-Sí.

domingo, 24 de marzo de 2013

To the limit {17}

-Eres toda una fiera.
-Sólo cuando quiero.-Digo graciosa.-Por esto, no significa que me gustes.
-Lo que tú digas.
-¿Interrumpimos?.-La voz de Chaz hace que me sobresalte.
-Oh no, estaba mareada y uso la primera escusa para agarrarse a mi.-Contesta rápidamente Justin. Le doy con el codo en el torso de una forma disimulada.

No dimos más explicaciones y nos volvimos a unir con las chicas y el grupito de Justin. Brit me guiña un ojo y yo le niego con la cabeza. Seguimos caminando, esta vez con un silencio algo incomodo, que lo  rompió Ryan dándole unas palmaditas a Logan en la espalda, en señal de que había jugado muy bien.

Miro a Justin que este tiene la cabeza bajada a su camiseta, que la sujeta entre sus manos. Gira rápidamente la vista hacía a mi y yo vuelvo a poner la mía hacía el suelo. Puedo notar como eso le a causado algo de gracia.

-¡Justin!.-Dice una voz ¿femenina? que no reconozco.

Este se gira y se acerca a la chica, una rubia de ojos verdosos, la abraza y ella le responde el abrazo. ¿Y esto? ¿se da el lote conmigo y ahora otra? oh no, está muy equivocado.

-Me voy.-Todas las miradas caen en mi ante mi comentario.
-¿Qué dices?.-Me susurra Kate agarrándome el brazo.
-Sí, después hablamos.-Me despido de las chicas con dos besos a cada una y a los chicos con la mano, paso de despedirme de Justin.

                                       NARRA JUSTIN

-Me alegro que esteis todos bien primito, haber si me paso.
-Cuando quieras.-Me da otro abrazo.
-Bueno, me tengo que ir.
-Ve con cuidado anda.-Me sonríe y se va.

Vuelvo con los demás, busco con la mirada a Emma, ¿dónde se a metido ahora?

-¿Y Emma?.-Le pregunto a su amiga, Brit.
-Se a ido.-Me echa una mirada y me hace una mueca para que gire la cabeza. La obedezco, no veo nada así que la vuelvo a mirar extrañada.-Justin...-Me dice como si fuera obvio lo que me quiere dar a entender.
-No jodas, ¿se a puesto celosa de la rubia?.-Digo seguido de una risa.
-Justin... te das el lote con mi amiga y después abrazas a otra a la primera de cambio. Y quieras o no, tienes fama de mujeriego, es normal que se enfade.
-No me he dado el lote con Emma, te dije que se mareó.
-A ti no te conozco, pero a Emma sí, y sé que no se mareó y estaba en perfecto estado.
-La rubia es mi prima.
-Eso mejor que se lo expliques a ella.

A los 10 minutos se van las chicas.

-Man, ¿ya te has tirado a Emma?.-Me pregunta Ryan.
-No.-Digo seco.
-¿Y para cuando?
-Tengo que arreglar un mal entendido, se a ido creyendo que mi prima es algo más.-Ryan me pasa un cigarillo ya encendido, y no se lo niego. Le doy una calada y se lo devuelvo.
-Déjala que piense lo que quiera, ¿qué más te da? la cuestión, es que acabe en tu cama.-Suelto el humo que tenía acomulado en la boca.
-Tengo que aclarárselo.-Se para en seco y me corta el paso.-¿Qué pasa ahora?
-¿Dónde está el Justin Bieber que se a llevado a medio instituto a su cama? ¿dónde está mi hermano que solo quiere vivir la vida y pasa de las tías, eh? ¿dónde? no te nos vayas tío.
-¿A que viene esto gilipollas?
-Te está importando Emma.
-Es otra más, pero más difícil, mucho más difícil.

Adelanto mi paso y le hago a los chicos un gesto con la mano en señal de despedida. Otra más... sí Justin, otra más.

Llego a mi casa, pero antes de entrar tengo que aclararlo todo. Me atrevo a llamar al timbre de su casa y suplico que no estén sus padres. Drew, ¿para qué haces esto? abren la puerta y afortunadamente, es ella. Hace el amago de cerrarla pero soy más rápido y pongo el pie. Se resigna y abre. Cruzamos miradas por una segundos, ¡mierda! ¿qué coño ha sido eso? ¿en el estómago? me furmina con la mirada. Otra vez eso, ¿electricidad? ¿tienes fiebre, Bieber?

                                       NARRA EMMA

-Quiero hablar contigo.-Me dice serio.
-Habla con la otra.
-Cariño, me encanta tus ataques de celos y vengo a aclarar todo sin peleas.-Le dejo paso.
-¿Yo? ¿celosa por ti? más quisieras.
-¿Están tus padres?
-No.
-Mejor.-Dice sentándose en el sofá.-Era mi prima.-Abro los ojos como platos.
-¿Quién me asegura a mi eso?.-Se quedo mirándome a los ojos y por primera vez, le creí.-Esta bien, pero no tienes que venir a explicarme nada. No me importa.
-¿Qué no te importa? ¡si te has ido con un ataque de celos!
-Que no estaba celosa joder, ¿cómo te lo doy a entender?
-Otro beso.

La puerta se abre y entran mis padres. Me han salvado.

-Gracias Justin por acompañarme, ya estoy mejor, puedes irte.
-No me des las gracias.-Dice levantándose.
-¿Pasa algo?.-Dice mi madre alarmada.
-No se preocupe señora, estábamos en un partido de baloncesto, hacía mucha calor y le dio un sofocón a su hija. Pero ya está estable.-Pillé su indirecta.
-Me mareé.-Contesto rápida.
-Bueno me voy.-Dice despidiéndose amablemente de mis padres y a mi, me guiña. Tras hacer esto desaparece por la puerta.
-Ese chico me gusta.-Contestó mi padre.
-Se le ve buen chaval.-Añade mi madre.
-Me voy a mi habitación.-Después de decir esto subo.

-¡Me debes un beso!.-Escucho desde la ventana. Sonrío y la cierro.

Sonreír Emma, has sonreído... ¿después del día que has llevado? "Puedes pasar ese verano de puta madre con Justin, no te pido nada serio pero piénsalo, no estaría nada mal." Las palabras de mi querida amiga retumban en mi cabeza.

                                          NARRADOR

Lo sabe, su corazón sabe mejor que nadie lo que está sintiendo, ¿miedo a reconocerlo? mejor dicho, miedo a que le vuelvan a hacer daño. Su corazón no se quiere resignar, pero tarde o temprano, tendrá que dar la cara.

Por otra parte, Justin, esta más confundido que nunca. Quiere una explicación a lo que a sentido, pero no quiere saber la respuesta. Para su cabeza Emma es otra como tantas, pero para el mismísimo Justin sabe que no. Mejor dicho, siente que no, pero de eso se tendrá que dar cuenta él sólo.

sábado, 23 de marzo de 2013

To the limit {16}

-Chicos contra chicas.-Dice Justin botando un balón.
-Tiene que haber un líder en cada equipo. En el de nosotros es Justin.-Dice Ryan dándole unos golpes en la espalda a su amigo.-¿Y en el vuestro?

Miro a Brit y ella echa un paso para atrás, luego a Marie que hace lo mismo, miro a los chicos que miran sin pestañear. Justin eleva sus cejas y sé lo que me quiere dar a entender. Suspiro vencida y Justin sonríe victorioso.

-¿Qué nos llevamos a cambio?.-Pregunto.
-Un beso.-Contesta Justin.-Aun que nadie os asegura que vayáis a ganar.
-¿Y si perdemos?
-Otro beso.
-Mejor... nosotras pensamos algún premio, y si perdemos...-No me deja acabar.
-Si perdéis me das el beso.
-Trato echo.-Nos damos la mano y me guiña un ojo.-El que antes llegue a cinco.

Echamos a piedra, papel y tijeras el campo, ganan ellos y escogen el de la izquierda. Nos colocamos y volvemos a echar a suertes quien empieza con el balón y de nuevo, ganan los chicos.

Empieza Justin que se lo pasa a Chaz y este a Logan, Marie y Kate hacen defensa en nuestra canasta. Aly para el tiro y Brit saca el balón. Este viene hacía mi dirección, lo agarro y voy hacía el campo de los chicos, Ryan me rodea pero lo esquivo, después Christian con el mismo proceso y quedo cara a cara con Justin, me mira y deja enseñar una franja de sus perfectos dientes, se acerca por mi izquierda y lo esquivo por la derecha. Canasta.

Las chicas se acercan a mi y nos damos un abrazo en grupo. Pero sigue el partido. Kate coje el balón que se lo pasa a Marie, esta de nuevo a Kate y lo acaba teniendo Brit. Ryan se lo quita y se lo pasa a Chaz que a este se lo quita Aly. El balón vuelve a mi, intento esquivar a los chicos y Justin se pone enfrente cortándome el paso.

-¿Por las buenas, o por las malas?.-Me pregunta desafiante.
-Despídete del balón.

Miro hacía la derecha donde me bloquean Christian y Logan y a mi izquierda Ryan y Chaz, me paso el balón unas cuantas veces de mano para intentar despistarlos. Miro a Justin que se esta... ¿quitando la camiseta? oh Dios. Se la quita y la tira a quien sabe donde, intento no quitar mi mirada de la canasta, pero este chico parece que cada día tiene más musc... ¡Mierda! me quita el balón y menos de 10 segundos encesta.

-¡Mierda!.-Grito.
-Ese lenguaje cariño.

Juguemos a su juego, Kate le quita el balón a Logan que se lo pasa a Marie, pero vuelve a pertenecer al grupo de los chicos gracias a Christian. Justin tiene el dominio, esta es la mía. Me acerco a él quedando cara a cara, acorto unos centímetros, otros cuantos, otros... hasta que solo nos separa una fina capa de aire que se puede romper perfectamente.

-¿Y si te adelanto el premio?.-Le digo bajando la mirada a sus labios.

El que da el paso es él y se acerca un poco más, se puede decir que nos separa... ¿1 centímetro? y cuando lo creo conveniente, lo rodeo y le quito el balón. Encesto.

Justin se maldice por dentro y yo le dedico una sonrisa angelical. Depués de una media hora vamos cuatro a cuatro, y hacemos un descanso.

-Emma, ¿y eso?.-Me pregunta Brit curiosa.
-Un truco que tenía bajo la manga.
-¿Un truco? si en el fondo lo deseabas.-Miro a Justin que se cuelga su camiseta en el hombro y bebe un sorbo de su botella de agua, vuelvo a mirar a Brit.-Cielo, puedes pasar ese verano de puta madre con Justin, no te pido nada serio pero piénsalo, no estaría mal.-Me dice graciosa.
-¿Seguimos?.-Grito y vuelvo al campo, al igual que el resto.

De esto depende lo que pueda llegar a pasar después, respiro hondo y dejo la botella de agua en un lado. Empieza de nuevo el partido. La coje Marie que intenta encestar, pero Christian no se lo permite, la coje Logan que se la pasa a Chaz y este de nuevo a Logan. La tira y cuando parece que ya estaba claro que ganaban ellos, Aly la detiene. Viene corriendo con el balón y me lo pasa, lo tiro y... ¿he encestado? ¿hemos ganado? no me da tiempo a reaccionar y las chicas vienen a mi como locas. Acabamos todas saltando en medio de un abrazo.

Miro a los chicos que se acercan a nosotras, nos separamos y nos miramos ambos grupos frente a frente.

-Buen partido chicas.-Dice Logan y Christian al ausonio.
-Muy bueno, pero quiero la revancha.-Dice Justin apuntándome con el dedo.

Reímos todos, no se lo han tomado muy mal. Avanzo unos pasos y miro a Justin, este no dice nada y le hago una seña para que venga y eso hace.

-¿Qué pasa?
-Quiero mi premio.
-Tú dirás.-Me quedo unos segundos en silencios.
-Un beso.-Justin eleva su ceja derecha.
-Per...-Le corto.
-Aun estoy a tiempo de arrepentirme.
-No te arrepentirías.
-¿Tú que sabes?.-Acorta unos centímetros.
-Porque te encanto.

Pone su mano derecha en mi mejilla acariciándola con su dedo pulgar, con la izquierda me agarra la cintura y madre mía, se me pone los vellos de punta y él lo nota.

-¿Qué te pasa?.-Me dice casi en un susurro.
-No sé... Justin.
-Como te he dicho, que te encanto.
-No hables y dame el put...
-Te voy a desgastar los labios.

Pasa su dos manos a mi cintura y yo le rodeo el cuello, acorta los pocos centímetros que nos separaban y nuestros labios parecen que cobran vida. Puedo notar su corazón mejor que nunca ya que no lleva camiseta, me pega más a él y yo suelto una especie de gruñido, Justin suelta una risa sin separarse y yo no puedo evitar hacer lo mismo. Vuelvo a sentir esa electricidad, no por favor, no quiero. Nos separamos para empezar otro beso, este más corto y sonoro, y hacemos el mismo proceso para otro, este sí es mas duradero. Dejo paso que nuestras lenguas se pongan un debate, después de unos minutos nos separamos y acaba dándome un pequeño mordisco en el labio inferior. Cojo aire y le doy uno en las comisuras.

-Eres toda una fiera.

viernes, 22 de marzo de 2013

To the limit {15}

                                     AL DÍA SIGUIENTE

                                     NARRA EMMA

El ruido del móvil me despierta, ¿a esta hora?, lo cojo y contesto, aun con los ojos cerrados.

-¿Sí?.-Pregunto con voz de dormida.
-Soy...-Esa voz...
-¿Jack?
-Veo que no olvidas mi voz.-Me acoplo en la cama y miro el móvil, "Número oculto".
-¿Qué quieres?
-Hablar.
-No hay nada de que hablar.
-Sí, y hay que hacerlo ya.-Dijo destacando el "Ya". Suspiro hondo.-¿Voy a la puerta de tu casa ahora?.-Vuelvo a suspirar.
-Esta bien.-Cuelga.

Es mejor dejar las cosas claras de una vez. Me levanto de la cama y miro el reloj, las 9 y media. Me doy una ducha de 15 minutos, salgo y me visto. Cojo mi móvil y bajo a la puerta. La abro y ahí está, petrificado mirándome como si nunca hubiera pasado nada. Cojo aire y salgo al exterior.

-Tu dirás.-Le digo fría.
-Te quiero.
-Bonita forma de demostrarlo.
-Emma entiéndeme, soy un hombre y tu siempre me negabas.
-O sea, ¿qué la culpa de que tú te hayas liado con otra es mía?
-No quería decir eso.
-Lo has dicho.-5 segundo de silencio.
-¿Quién era ese?
-¿Quién?
-El de la playa.
-No te tengo porque explicar.-Otro momento de silencio.-¿Es verdad que traficas?
-Sí.-Suelto una risa irónica.
-¿Qué traficas? ¿drogas?.-No contesta así que vuelvo a hacerle la pregunta.-¿Drogas?
-Lo que me manden.
-¡Te pueden meter en la cárcel! y lo peor, que yo era tu novia y no me habías dicho nada.
-No tienen porque meterme en la cárcel porque no vas a hablar, ¿verdad?.-Ese tono me asusta.
-¿Y si hablo?
-No te lo recomiendo.
-¿No? ¿que me harías?.-Se acerca a mi agarrándome fuerte el brazo izquierdo.
-Si tu hablas, lo comprobarás tu misma.-Me suelta.-Me tengo que ir, era solo para eso y ya sabes, con la boquita cerrada estás más guapa.-Me guiña un ojo y se va.

Me agarro el brazo, me ha dejado los dedos marcados y esto ya me asusta, Jack me a echo saber que de él se puede esperar cualquier cosa.

Vuelvo a entrar en mi casa. Y según él, ¿yo he acabado con esto? ¿con nuestra relación? ¿con todos los planes que teníamos por delante? ¿y si es verdad Emma?, ¿y si ha sido tu culpa? demasiadas preguntas me estoy haciendo y lo peor, todas sin respuesta.

Subo al baño y me apoyo en el lavabo. Se escuchan el ruido de mis lágrimas caer a este, cierro fuerte el puño derecho y subo la mirada al espejo. Ahora mismo lo rompería en mil pedazos. Pero no, doy un porrazo a el mármol dejando parte de mi mano roja. Siento una angustia en el pecho, ¿presión?, si pudiera, acabaría con todos los problemas que me rodean, acabaría con tod...

-¡Emma! ¡tienes visita!.-La voz de mi madre hace que salga de mis pensamientos.

Bajo y son ¿las chicas? ¿todas? me extraño y voy corriendo hacía la puerta.

-¿Pasa algo?
-Oh nada, no te asustes, era para que te vinieras a comer con nosotras.-Dice Brit.
-Chicas gracias, per...
-No acepto un "No" por respuesta.-Dice Aly.
-Per...
-No hay peros que valgan.-Me corta Kate.

Suelto unas risitas por lo bajo. Es imposible decir que no. Miro a mi madre y ella me asiente al igual que mi padre. Le grito un "Os quiero" y cierro la puerta detrás de mi.

Aun que les confío todo, no tengo ganas de hablar de lo de Jack. No quiero ponerme como me he puesto hace unos minutos. Marie me hace una mueca dándome a entender que le explique que me pasa y yo simplemente le niego.

Aly se para en seco y se pone roja, frunzo el ceño y miro hacía el frente, oh no por favor, lo que me faltaba. Justin y su grupito. Se quedan quietos delante nuestra. Chaz le sonríe a Aly que esta hace lo mismo tímida.

-Hola preciosidades.-Dice Justin, ¿preciosidades?
-Hola.-Dicen todas alegres al ausonio, menos yo.
-¿Tú no me saludas?
-No.
-También me alegro de verte.
-¿A donde ibais?.-Pregunta Marie.
-A echar un partido de baloncesto, ¿os apuntáis?.-Pregunta Christian.
-No.-Contesto. Brit se acerca y me susurra al oído:
-Emma, quiero pasar un verano de puta madre y quiero que tú también, pero si te quedas sin hacer nada, amargada por Jack, no lo vas a conseguir.-Aly me hace pucheros y vuelvo a mirar a Justin que me guiña un ojo, mi corazón empieza a coger otro ritmo más brusco.
-Esta bien.-Brit me abraza por detrás y las demás dan un pequeño salto.
-Perfecto, a las 4 y media en la pista de baloncesto. Después nos vemos chicas.-Dice Ryan, y con la misma se van.

Por el camino le cuento todo a las chicas, ya que no paraban de hacerme preguntas y no les puedo engañar. Se me aguan los ojos pero no es buen momento para llorar, así que me trago las lágrimas.

Llegamos a un Telepizza, nos sentamos en una de las mesas del exterior y pedimos dos familiares de jamón con queso. Yo me como dos trozos ya que son porciones grandes y en media hora estamos comidas. Bebo el último sorbo de mi refresco y lo dejo en la mesa. Esperamos unos 5 minutos que nos repose la comida y nos levantamos. Pagamos entre todas y salimos del establecimiento.

Ahora viene lo peor, la pista de baloncesto está a minutos andando. Si fuera por mi saldría corriendo y me escaparía de todo esto, pero no, voy a dar la cara al igual que lo he echo Jack. Es casi el principio del día y ya han pasado muchas cosas, demasiadas.

-¿Emma? ¿me estas escuchando?
-Claro Kate, dime.
-Ya hemos llegado.

Me empieza a acelerar otra vez el pulso, oh no.

-Chicos contra chicas.-Dice Justin botando un balón.


viernes, 15 de marzo de 2013

To the limit {14}

-Eres preciosa, ¿sabes?
-Mentiroso.
-Los Bieber's siempre vamos con verdad por delante.
-Pues contéstame con la verdad, ¿te has enamorado alguna vez?.-Su expresión cambia.
-Cuando estaba en plena juventud, conocí el mundo que te he contado. No me ha dado tiempo.
-¿Nunca has sentido nada especial por alguien?
-Tú lo has estado, dime lo que se siente.
-Lo sabes, porque necesitas a esa persona más que a tu vida.

Se cambia de postura de forma que acorta centímetros de distancia, el corazón me empieza a ir a mil.

-No me niegues que quieres que lo haga, tanto como yo.
-No te lo voy a negar.-No se lo puedo negar. Acorta unos centímetros más.-Pero otra cosa es que te lo vaya a permitir.
-¿Y si te lo robo?
-Eso ya sería diferente, no podría hacer nada.

Y rompe la distancia, la puta distancia que estábamos deseando romper. Junta sus labios con los míos y nos besamos como si no hubiera mañana, como si este fuera el beso que llevábamos esperando toda la vida. Nuestras lenguas entran en una guerra continua, le tira un pequeño mordisco a mi labio inferior que hace que suelte un suspiro algo sonoro, sonríe sin acabar este beso. Ahora soy yo la que tiene el control y me muevo poniendome casi encima de él, apoyando mis manos en el cesped, me agarra de la cintura y un simple beso parece que ha cobrado vida. A los minutos nos separamos para coger aire.

Puedo notar como el corazón está por salirse de su pecho, tiene la respiración agitada al igual que la mía. ¿Qué has echo Emma? ¿le has pedido tú que te diera este beso?

-No Justin, yo no...
-Tú sí, tú y yo queríamos, no hay que arrepentirse de nada.
-Mierda, soy gilipollas.-Digo poniendome de pie.
-No, no lo eres. Queríamos los dos.

Se acerca a mi y agarra mi cara entre sus manos, eso hace que me de un escalofríos extraño. Me da un beso sonoro y no se lo impido.

-Justin, yo te vi besándote con Lotte en el instituto, yo acabo de romper con Jack...
-No tengo nada con Lotte.
-¿Cómo sé que no me estás mintiendo?
-Porque tienes algo, que no puedo hacerlo.
-Para ti tener novia no existe, jugar con los corazones de las chicas se ha convertido en algo común para ti, ¿no lo entiendes Justin? es todo, que no te tendría que...-Me corta poniendo su dedo indice en las comisuras de mis labios.-Acabo de dejarlo con Jack.
-Te comprendo.-Eso me alegra. Le sonrío como respuesta.
-Vamos, te llevo a tu casa.-Asiento y voy hacía la moto.

Esta vez me subo en la moto sin esperar a que me ayude, se sube él y proseguimos el mismo camino de vuelta que el de ida.

En media hora llegamos.

-Me lo he pasado bien.-Le digo cabizbaja.
-Y yo.-Sonrío y me giro para entrar en mi casa. Mierda Justin, no me dejes ir así después de todo.
-Emma.-¿Este chico lee mis pensamientos?
-Dime.-Me giro y deposita un beso en la comisura de mis labios, y se va como si nada. Yo hago lo mismo.

Entro en mi casa, son las dos, Emma, lo que has echo no está bien. Me digo a mi misma. Intento quitar esta estúpida sonrisa de mi cara, pero no puedo ponerme sería. Subo a mi cuarto sin hacer ruido y me cambio, cojo el móvil y marco el teléfono de Brit.

-¿Sí...?.-Dice con voz de dormida.
-¡Brit! ¡no te lo vas a creer!
-¿Qué me estés llamando a las dos de la mañana? pues no, creo que estoy soñando.
-¡Tía! ¡que nos hemos dado un beso!
-Joder, ¿Qué dices?.-Su expresión y su voz cambia por completo.
-Haber, hablamos y hablamos y nos besamos y fue muy raro.
-¡Emma! ¡os gustáis!
-No te pases que a sido sólo un beso.
-¡Un beso! eso es mucho.
-No tuvo que haber pasado, estoy muy confundida.
-Cielo, descansa, ¿vale? y mañana me cuentas calmada y con las ideas claras.
-Lo aré, un beso.
-Adiós.-Cuelgo.

Abro una franja de la cortina, la luz de la habitación de Justin se apaga. Me acuesto, es verdad lo que dice Brit, tengo que aclarar mis ideas.

                                       NARRA JUSTIN

¿Qué has echo Justin? ¿qué has echo? la has besado, ¿pero porque? no tío, eres gilipollas. Pero es tan tan... ¡Mierda! soy un estúpido, no no, Emma es otra, es otra más Justin. Eso que te entre en la cabeza. Cruzo mis brazos y apoyo en ellos mi cabeza, suspiro hondo y se me dibuja una puta sonrisa, ¿a que viene esto Justin? ¿Tanto te está afectando no estar con tías, ni ir de fiesta? tengo que relajarme, cierro los ojos para intentar conciliar el sueño y aun que me cuesta, lo consigo.


To the limit {13}

Ya son las 12, miro por la ventana y efectivamente está Justin abajo, puntual, el corazón me da un huelco, voy a necesitar suerte.

Salgo de mi cuarto sin intentar hacer ruido, están todas las luces apagadas, mis padres ya se deben haber acostado. Bajo las escaleras con mucho cuidado hasta que por fin, estoy en la puerta. Ya no hay marcha atrás Emma. Abro la puerta y Justin se gira al ruido, esboza una sonrisa de oreja a oreja y yo hago lo mismo.

-¿A dónde me piensas llevar?
-Tranquila señorita, no seré yo quien lo haga.
-¿Entonces?
-Mi amiga.-Dice señalando una Yamaha, ¿Está loco?
-¿Es tuya?.-Asiente.
-También tengo un coche, pero hace muy buena noche, así que vamos en moto.
-¿Crees que me voy a subir en eso? lo llevas claro.-Digo entre risas cargadas de ironía. Y el responde con otra, pero no en ese sentido.
-No me digas que a Emma Sweet, la valiente Emma Sweet le tiene miedo a las motos.
-No les tengo miedo, solo que no me gustan.
-Venga sube.
-No.
-Emma, sube.
-Ya te he dicho que no.
-¿Te subes o te subo?.-Eso me asusta un poco.
-Nada, que no.-Se acerca a mi y mis nervios aumentan.
-¿Crees que te montaría en algo que te hiciera daño? ¿o que yo mismo me montaría?
-Quien sabe.
-No te va a pasar nada, confía en mi.-Eso es fácil decirlo.
-¿Me lo prometes?
-Te lo prometo.-Se giro y me vuelve a señalar la Yamaha negra.

Respiro hondo y me acerco, eres tonta Emma, ¿para que has venido? Justin me extiende la mano, se la agarro y me subo en el asiento, me acomodo y luego se sube él delante mía.

-Agarrate.
-¿A dónde?
-A el árbol que está allí.
-No seas gilipollas.
-¿Dónde te vas a agarrar? a mi cintura.
-¿Que dices? antes prefiero caerme.
-Tú misma. Por cierto, estas muy sexy.-Me guiña un ojo y la cara empieza a arderme y tomar color.

Escucho el ruido de la moto bastante fuerte, el corazón se me va a salir del pecho y no, la verdad es que no prefiero caerme. Me rindo y me agarro a su cintura, sin hacerle daño pero fuerte. Miro a Justin que sonríe victorioso, frunzo el ceño, al fin y al cabo, no tengo otra opción.

-Va a ser una de las mejores sensaciones que vas a vivir en tu vida.
-Oh si, ¿subirme en una moto?
-Créeme que te vas a sentir libre.
-Espera, ¿y los cascos?
-Con el casco no es lo mismo, deja que el viento te despeine y tu sólo, siéntete "Al límite" (To the limit).-Y arranca.

Va demasiado rápido, apoyo mi cabeza en su espalda y cierro fuerte los ojos. Cada vez me arrepiento más de haber venido.

-¿No te gusta?
-Para nada.
-No te aferres, mira al frente y cierra los ojos.

No tengo otra que cosa que hacerle caso, sigo sus instrucciones. Levanto la cabeza y miro al frente, suspiro y cierro los ojos y diciendo la verdad, se esta mucho mejor.

-¿Vas mejor?
-Sí.

Y en el resto del camino solo se escucha el ruido de la moto. En una media hora para, baja él primero y luego me ayuda a mi, por fin estoy en el suelo.

Miro al frente, este lugar no lo había visto nunca. Hay árboles y el suelo es todo césped, se puede ver Stratford entero iluminado. Voy avanzando mi paso pero noto las manos de Justin que me agarran de la cintura, aferrándome hacía atrás.

-¡Cuidado!

Doy unos pasos hacía dentro y miro para abajo, es un precipicio. Tiene que ser una montaña. Suspiro y él me suelta. Giro y quedamos cara a cara, nuestras miradas se cruzan 5 segundos hasta que Justin se da la vuelta y se sienta, apoyando los codos en sus rodillas, mirando a la nada.

-¿Y este sitio?
-Cuando quiero estar solo, vengo aquí.
-No te creía de ese tipo de chicos.
-¿De ese tipo como?.-Dijo gracioso.
-No sé, sensibles.
-Hay muchas cosas que no sabes de mi.-Eso me desconcerta y me siento a su lado, abrazando mis rodillas.
-¿Cómo cuales?
-Que tengo una parte "humana".
-No dije que no lo fueras.
-Pero lo pensaste, pensaste que era un mujeriego, que no me tomo nada en serio, también pesaras que soy un cabrón.-Hizo una pausa y se rió por lo bajo.-Pero tengo 19 años, quiero disfrutar de la vida, no vivir malas experiencias.
-Se puede disfrutar de la vida de varias maneras.-Le corté.
-Lo mejor es vivirla como la viven todos, así no sólamentes la vives, encajas.
-¿Para ti vivir la vida es fumar, alcohol y sexo?.-No contesto.-Yo creía que la estaba viviendo cuando conocí a Jack, pero me equivoqué.
-Enamorarte no es la solución.
-Lo es, cuando es correspondido y sabes que esa persona es especial.

Me mira y ahora la que aparta la mirada soy yo, desde aquí se ven muy bien las estrellas.

-No todos es color de rosa.-Me dice.
-Lo sé de sobra, ¿nunca te has sentido sólo? ¿con ganas de escapar de todo?
-No tienes porque sentirte sola, recuerda que todos vivimos bajo un mismo cielo y miramos una misma luna.
-Eres todo un filósofo.
-Tengo cosas buenas.-Dice elevando un poco las manos.

El silencio es el mejor acompañante, cruzamos por segunda vez miradas, estas mas duraderas.

-Eres preciosa, ¿sabes?


To the limit {12}

                                      AL DÍA SIGUIENTE

                                         NARRA JUSTIN

Salgo de la ducha, me lío de la cintura para abajo en una tolla y con otra me seco la nuca. Rebusco en mi armario y cojo lo primero que encuentro, me visto y me abrocho las Supras. Me peino y guardo el móvil en el bolsillo, bajo los escalones hasta la cocina, donde mi madre está lavando los platos.

-Voy a salir, te quiero.-Seguido le deposito un beso en la mejilla.
-Ten cuidado.
-Lo tendré.

Salgo y cierro la puerta, me guardo las manos en los bolsillos y bajo la cabeza, una voz desconcerta mis pensamientos, espera, ¿Emma? me giro y efectivamente es ella.

-¿Dónde vas?.-Me pregunta graciosa.
-A dar una vuelta, ¿vienes?.-Le guiño el ojo.
-Ni loca.
-Ni que te fuera a violar.-Eleva sus cejas. Una idea viene a mi cabeza como por arte de mágia.-Dime sí o sí.
-¿Cómo?
-Lo que oyes, dime sí o sí.
-¿Sí?
-Perfecto, a las 12 de la noche, en la puerta de tu casa. No te tardes.
-¿Qué?

No le contesto y sigo mi camino, ella me vuelve a llamar pero la ignoro. Cuando cruzo la esquina suelto una pequeña risa que me estaba aguantando.

                                    NARRA EMMA

¿A las 12? ¿esta noche? Dios, esta loco, y yo lo estoy más si voy. Cojo mi móvil y llamo a Brit.

-¿Sí?
-¡Tía! he quedado con Justin está noche.
-¡Júramelo! ¿te lo ha pedido él?
-Sí.
-Esto es el comienzo de una bonita historia.
-No seas tonta, todavía no sé si voy a ir.
-¿Cómo que no? tienes que ir sin falta
-Es que conociéndolo...
-Conoces lo que él aparenta, pero, ¿y si en el fondo de él hay un chico dulce? incluso que te llegue a enamorar.-El corazón me da una palpitación muy fuerte y vuelve a su ritmo normal, ¿qué a sido eso?
-No sé yo que decirte.
-Venga Emma, no pierdes nada.
-Me lo pensare, en serio.
-Así me gusta cielo, bueno, me llaman. ¡Un besito! y ya me contaras .-Dijo con voz divertidad.
-Adiós.-Cuelga.

Me siento en la cama con el móvil en la mano. "Conoces lo que él aparenta, pero, ¿y si en el fondo de él hay un chico dulce? incluso que te llegue a enamorar." No Emma no, por nada del mundo lo pienses, él no se toma en serio a ninguna chica y paso de que se vuelva a repetir lo de Jack.

                  
                                     NARRADOR

¿Estará creciendo algo dentro de Emma que ella ignora? ¿y de Justin? según ellos se odian y ninguno de los dos son su tipo, pero del odio al amor dicen que hay un paso y si ellos son valiente, desafiaran a su corazón y darán ese pequeño gran paso. 

                                    NARRA EMMA

Termino de comer y dejo mis cosas en el fregadero, me siento en sofá y enciendo la TV, ¿un documental? paso de canal. Mierda, estoy en un aprieto, no sé que hacer, ¿y si voy y luego me arrepiento? o si no voy, puede que también lo haga. No hay nada así que apago la TV. 

Pasan las horas, las 8, las 9, y ya son las 10 y media. Tengo los nervios a flor de piel y aun no sé que hacer. Doy vueltas de un lado a otro por mi habitación, ¿y si es verdad lo que dice Brit y Justin tiene un lado bueno? pero no, sería una ecepción muy difícil.

Sufro un mini-infarto al escuchar el teléfono, lo cojo y le doy al botón verde.

-¿Sí?
-¡Tía! ¿Estás lista ya?.-Es Brit.
-No sé que hacer.
-¿Cómo que no sabes? ¿porqué?
-¿Y si es verdad lo que tu dices? no quiero que se repita lo de Jack.
-Cielo, no se tiene porque repetir. No todos son iguales.
-Es verdad, Justin es peor.
-¿A ti te gusta?
-No... sé, no no.
-Sácate las dudas.
-¿Cómo?
-Eso solo lo sabes tú, ahora ve y preparate tonta, te quiero.-Y cuelga.

Siempre he dado la cara, ¿porqué no voy a hacerlo ahora? miro el reloj, las 11 y media, tengo que darme prisa. Abro el armario y saco unos jeans cortos, me pongo una camiseta blanca de tirantes muy pegada y encima una verde agua, esta más ancha y dejo que se vea un poco la blanca. Entro al baño y me peino y me maquillo un poco, linea negra en el ojo, rimel y coloretes. Voy de nuevo a mi cuarto, cojo el móvil y me lo meto en uno de los bolsillos del pantalón, me miro por última vez al espejo y me retoco un poco, estirando la camisa y poniendome bien el pelo.

Ya son las 12, miro por la ventana y efectivamente está Justin abajo, puntual, el corazón me da un huelco, voy a necesitar suerte.